domingo, 29 de julio de 2012

Espejo de verdad, espejo de mentiras.


Un día te miras al espejo,
y te sientes extraño,
totalmente distinto,
ajeno a ti,
a tu persona.

Has dejado de ser esa persona,
la persona que creías ser,
una persona capaz de enamorar a otra,
capaz de convertir en sueño
cada una de las realidades que vive.

En ese momento sientes,
que estás perdiendo a esa persona,
a las dos,
a esa persona especial que te acompañaba,
y a ti mismo mismo.

Que, cuando llega ese momento,
en el que tu reflejo no eres tú,
dejas de  querer tu propia compañía,
tu propia presencia te incomoda,
y no puedes hacer nada,
no sabes como remediarlo,
no puedes dar simplemente marcha atrás
no puedes volver al pasado y volver a empezar.


Es en ese mismo momento,
al mirar al espejo,
cuando te miras,
y buscas tus propios ojos,
tu mirada,
y no te reconoces,
cuando se te cae el mundo encima,
cuando te preguntas quién eres,
qué haces,
qué pretendes conseguir,
cuando te cuestionas si no te estás equivocando,
cuando te planteas si no eres ya lo suficientemente feliz
cuando ya no sabes que camino seguir.

Sin embargo lo enmascaras
¡Siempre lo hacemos así!
Escondemos la tristeza
la inseguridad de seguir
miramos hacia otro lado,
omitiendo lo pasado,
disimulando,
con una sonrisa,
lo que el corazón quiere sentir.



Lo malo no es,
mirarte al espejo 
y que no te guste lo que ves,
sino mirarte en él,
y no reconocer quién eres.


Essie

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Translate